El objetivo terapéutico se centra en trabajar con el origen real de la conducta alimentaria. Ya que en la base se encuentran traumas no resueltos y diversas situaciones críticas vividas y pendientes de abordar. Es necesario abordar dicho origen desde una exploración vital, que identifique todos los puntos de dolor emocional y las distorsiones asociadas. Al mismo tiempo se hace necesario un trabajo de consciencia corporal y conexión que permita retomar una visión realista de uno mismo, con una aceptación incondicional.
Para restablecer las relaciones de forma adecuada se trabajarán las habilidades sociales, principalmente la capacidad para enfrentarse a los conflictos y resolver problemas, aprender a decir No y poner límites. Igualmente la gestión emocional, explorando formas saludables de afrontar situaciones estresantes. Y todas las acciones para mejorar el autoconcepto y el estado de ánimo.
Para ello se utilizan las técnicas provenientes de la psicología cognitiva, la atención plena, la aceptación y compromiso, como aquellas que trabajan la consciencia corporal y la gestión emocional. Como terapeuta apoyaré con la mayor calidez, empatía y sensibilidad todo el proceso de reajuste personal, dotando de herramientas para la auto superación futura a largo plazo.